Una vez había cruzado la frontera de Sonauli «Nepal-India,» saliendo de Gorakhpur, una ciudad sobre el río Rapti en el sector este del estado de Uttar Pradesh en India, cubrí la distancia de 273 kilómetros que me faltaban para llegar a Lucknow la capital del estado y alcanzar así el tren que me llevaría a New Delhi. Fue en la estación misma donde me di cuenta que había llegado a la India y todo había cambiado. Allí me encontré a cientos de personas que estaban durmiendo tiradas por los suelos cubiertos con mantas mientras veía con asombro cómo pasaban por encima de ellos gigantes ratas, yo observaba aquel panorama petrificado y no lo podía creer, a la vez que miraba las vacas que andaban a sus anchas por los andenes metiendo la cabeza por las ventanillas del tren.
NUEVA DELHI
Mi llegada a New Delhi fue emocionante pues me esperaba Sanjai un amigo Indio que conocí en la isla de Kupang ( indonesia ).Tras reencontrarnos después de 5 meses nos dirigimos a su casa en el distrito o barrio de Subhas Nagar, 11 estaciones de metro más allá de la estación central. La ciudad que en la mayoría de los casos solo se utiliza como punto obligatorio de llegada y retorno se convertiría en mi hogar más tiempo del que hubiera imaginado.
Subbash Nagar es un barrio clase media y la casa de mi amigo Sanjai es un bloque de 3 pisos, en la parte de abajo vive él, su mujer Madhu, y su hija Tamu, un pequeño apartamento con cama matrimonial cocina y baño que utilizan para el colegio de la niña en Nueva Delhi. En el segundo piso vive la Tía y arriba en el ático los vecinos los cuales son parte de la familia.
Cuando cojiamos el tuc tuc y pasabamos por delante del Pacific Mall al dirigirnos a la estación todos los días, mi vista se detenía en los Slum o barrios marginales donde veía a los niños durmiendo en camas de madera en la misma calle, las casas construidas de barro, algunas de ladrillo, hojalata, de plástico y cartones.
Cerca de la calle del mercado de los jueves donde iba a las compras con Madhu, siempre estaban haciendo celebraciones, podía ver repartidas por toda la calle enormes potas de comida donde cocinaban con palas de madera como acción de gracia a los pobres. Sijismo es una religión india monoteísta, fundada por Guru Nanak ( 1469-1540) sus seguidores se llaman Sijes, en el barrio de Subhash Nagar viven una gran comunidad de Sijies, en sus templos repartidos por toda la india puedes comer y dormir gratis, aceptan a todos los fieles y todas las religiones. Era una escena común en mis paseos encontrarme con estas personas tan generosas, que creen en la igualdad de todos los seres humanos y en la gracia de Dios. Vestidos con turbantes cubrían sus largos cabellos que no se cortan y sin afeitarse la barba para ser puros.
Al atardecer cuando llegaba de mis paseos a la casa de Sanjai, siempre me encontraba con un tumulto de gente en la calle que se aglutina levantando los brazos empujándose y gritando unos contra los otros, era la hora de descargar la mercancía del camión, cajas de cartón llenas de licores, whisky, ron o vodka que se iban repartiendo allí mismo. Se guardaban por los bolsos las botellas pequeñas y envolvían en papel de periódico las grandes. Bebidas alcohólicas que llegaban todos los días a la licorería pero que con tanta demanda no era suficiente.
Aquel día en el barrio de Subhas Nagar, la casa del vecino era pura magia y color, el día de la boda a la casa de la novia llegó su prometido montando en un caballo con una espada en su cintura, vestido de traje de seda blanco, el turbante en la cabeza, y lleno de billetes que colgaban sobre su cuello. Eran los familiares y los amigos quienes bailaban al compás de una orquesta, a la vez que ofrecían como regalo dinero que iban pasando por encima las cabezas, llevaban unas lámparas o candelabros de plata y cristal a lo largo de todo el trayecto hacia el lugar de la ceremonia, y era en un coche donde llevaban el generador que iba dando luz en la noche por las calles de New Delhi.
Sanjai y yo habíamos llegado en taxi a la carpa o Mandap donde se celebraba el cortejo. Una vez adentro había carpas con comida vegetariana y no vegetariana, lo que era un buffet libre. Me sentía feliz de ser invitado a una boda tradicional de la india. La novia apareció con un sari de color rojo brillante que cubría su cuerpo y cabello, las manos las llevaba pintadas de Henna, y el novio vestido como un Maharajá allí estaba sentado esperando a su amor en el altar. Cuando los prometidos se encontraron se subieron a una plataforma redonda situada en el centro que giraba sobre sí misma, que arrojaba a la vez cantidad de flores y en la que sonaba una música ceremonial, mientras intercambiaban sus anillos prometiéndose amor eterno. Ya oficialmente eran marido y mujer. Todos los días sucedía algo diferente en el barrio de Subhas Nagar. La increíble india que tanto uno puede odiar o amar.
MI REGALO DE REYES AL TAJ MAHAL
Fue el día de reyes que Sanjay contrató un taxi y fuimos desde Delhi a Agra con toda la familia a conocer el El Tah Majal, construido en honor a su esposa favorita que murió en el parto de su hija, una bella y trágica historia de canto al amor, poesía hecha arte. Un Mausoleo de mármol blanco de soberbia perfección y simetría, grandioso por lo romántico de su inspiración, todo era poco para el hogar de reposo de su amada.
Solo de vez en cuando cada ciertos días bajábamos a visitar algo de la ciudad de nueva Delhi:
Paharganj el barrio de mochileros por excelencia de nueva Delhi , guest house , casas de cambio , agencias de viaje , bolsos , incienso , sandalias , carteles por todos los lados , joyerías, un clásico de nueva Delhi que hubiera sido mi hogar de no ser por la invitación de mi amigo Sanjai .
New Delhi , Old Delhi o Chandi Chowk buscavidas, charlatanes, autorickshaw, bici rickshaws, estrechas calles con un intrincado cableado, comidas, especies, venta de hogar, saris y sedas coloridas, faquires, encantadores serpientes, limpiadores de oídos. Una ciudad en la que conviven diferentes religiones, castas y razas con una contaminación y un ruido absorbente que sin duda te tendrás que ir acostumbrando .
El fuerte Rojo, India Gate, Templo de Loto, y mi favorito El Templo De Akshardham un templo nuevo del 2008 que parece antiguo con figuras esculpidas y jardines, un nivel de tallado de mármol blanco, de piedras preciosas y oro en su interior que envidiaría el propio Tah Majal, es una maravilla del mundo moderno que no puede dejar de visitar en su viaje a Delhi, y se llega fácil en el metro ya que se encuentra en la misma estación de Akshardham, eso sí, a la salida los bici rickshaws le convencerán para llevarle al templo, y le darán una vuelta por la ciudad lo que es una cosa innecesaria ya que el mismo está situado justo detrás de la misma estación, apenas llegará en unos minutos andando. Tómese con humor el tour si es que se sube al bici rickshaws sin saberlo y disfrute el trayecto por la ciudad sino su viaje por la india podrá convertirse en una autentica tortura.
jaipur
Jaipur ( la ciudad roja ) es la capital del estado de Rajastán en la india. Evoca la familia real que alguna vez reinó en la región y que, en 1727, fundó lo que hoy se conoce como la » ciudad vieja»o «ciudad rosada» por el característico color de sus edificios. Mi vista alcanza el interior de los muros, fuertes y Palacios antiguos, arquitectura Rajasthan en la vieja ciudad donde los Palacios te transportan a épocas de edificios exquisitos de terracota roja. En el centro de su cuadrícula de calles, se alza el opulento complejo del Palacio de la Ciudad con sus columnatas. Con jardines, patios y museos, sigue siendo en parte una residencia real. El color rojo envuelve la ciudad, un color que embadurno Jaipur en el año 1905 como muestra de hospitalidad al príncipe de Gales en su visita, tinte rosado que trae fortuna, caballerosa y envejecida, puerta de entrada a un mundo de Leyendas en el colorido mundo del Reino de Rajasthan .
En el Chandpole Bazar encontraréis tiendas de especie y alimentación, en el Tripolia Bazar menaje para el hogar, en el Bapu Bazar moda, calzado y perfumes, en el Johari Bazar joyería de piedras preciosas y semipreciosas, ( aunque hay que tener cuidado con los timos y estafas que están a la orden del día) .
Puede visitar Hawa Mahal o Palacio de los Vientos, construido en 1799 para albergar a todo el harén de mujeres del marajá Sawai Pratap Singh, el palacio de la ciudad, que es la residencia de los gobernantes de Jaipur desde el siglo xviii, el Palacio Viejo de Jaipur, conocido también como Palacio Del Agua, por su ubicación en medio del lago Man Sagar.
A tan solo 11 kilómetros de Jaipur se recomienda visitar el complejo palaciego de Amber, «Fuerte De Amber», una mezcla de estilo hindú y musulmán, construido en el siglo xvi.
Cine Raj Mandir, no se olvide de comprar la entrada al cine en Jaipur, podrá ver una película de Bollywood bien sea romántica o de acción al estilo indio, y pensará que ha sido invitado a una fiesta, porque todos bailaban cantan, se divierten y celebran en la sala metiéndose por completo en el papel.
Puskhar
Pushkar se encuentra a 11 km de la estación de autobuses de Ajmer. La compañía Rajasthan Roadways dispone de autobuses modernos desde Jaipur a Ajmer, Indore y Nagda cada 15 minutos. En automóvil la carretera desde Jaipur es buena, el trayecto es de unas 3 0 4 horas. La estación más cercana de tren está situada en Ajmer, la cual, a su vez está conectada a las principales ciudades de la ciudad. Por aire el aeropuerto más cercano es el de Jaipur, la capital de Rajastán. Jaipur está conectado a las principales ciudades de la india, tales como Delhi, Bombay, Calcutta, Jodhpur, Udaipur.
La mitología hindú cuenta que dios liberó un cisne con una flor de loto en su pico, este libero la fe en la tierra donde Brahma desempeñó su labor. Pushkar es uno de los lugares más antiguos de la india y una de los 5 Dhams o lugares sagrados de peregrinaje, asentada a la orilla del lago Pushkar con el templo de Brahma » El dios de la creación», 52 ghats donde los peregrinos se sumergen para bañarse en sus aguas sagradas. Un pueblo descubierto por los hippies y ahora lleno de hippies por igual y los nuevos hippies capitalistas. A Pushkar llegan turistas de todos los lugares del mundo para compras ropas, tela y artesanía de la india. Pasear por sus calles, tropezarse con sus procesiones y ceremonias de casamiento, ver a las mujeres cargadas de brazaletes con sus saris coloridos cubriendo sus cabezas, la música que todo lo impregna, las vacas que son las dueñas de las calles asaltando al descuido cada puesto de verduras o frutas al servicio del dios Brahma, los perros ladrando, los batidos especiales de marihuana para los mochileros, purificación en los ghats a orillas del agua sagrada, charlatanes de religión Brahmánica, una donación para el templo. Realidades y mentiras que solo el que viaja por la india puede descubrir, creación y destrucción en estado puro. Increíble india que tanto amo aquí y ahora desde este instante, llena de explosión, de color y amargura, de una alegría permanente en la ciudad de la flor de loto azul.
JODHPUR
A Jodhpur se le conoce como la ciudad azul debido al color azul índigo del que están pintadas las paredes de muchas de sus casas. En un principio era así porque un importante porcentaje de su población estaba formado por Brahmanes, la casta sacerdotal hindú, quienes veneraban sobre todo a Krishna, cuyo rostro tiene este color. Hoy en día, sin embargo, los inquilinos siguen pintando la casa de color azul proporcionando frescor y alejando así a los mosquitos en verano.
En pleno centro histórico se encuentra Ghanta Ghar: la Torre del Reloj, conocido por ser el punto neurálgico de la ciudad. Esta torre fue edificada por órdenes del Maharajá Sardar Singh, a finales del siglo xix, y en sus inmediaciones tiene lugar el mercado más popular Sardar Bazar, en honor al nombre de la persona que construyó dicha torre. Es el lugar más colorido y lleno de gente en Jodhpur. No se vaya sin probar el Lassi, los famosos yogures o batidos de la India.
La mejor vista de esta ciudad se puede observar desde el Fuerte de Mehrangarh, construido por Rao Jodha en el año 1459, que se extiende sobre una gran superficie y está construido sobre una colina a 125 metros de altura a las afueras de Jodhpur.